Las prisas nunca son buenas
Ayer por la mañana se levantó + viento y + mar. La ansiedad nos puede jugar malas pasadas, sin embargo debido a la sencillez del aparejo y su ligero peso volcar no fue un grave problema.
Las prisas hicieron que olvidase la orza y claro sin orza volcar es relativamente fácil. Reflotar el kayak fue muy sencillo y al ser auto-vaciable caes directamente al agua sin peligro de quedar atrapado y basta con darle la vuelta desde el agua para que todo el aparejo regrese a su posición al mismo tiempo. Luego tienes que subir pero eso no supone un problema en mi caso :-)
La ventaja de haber usado madera en las orzas impidió que fuera directamente al fondo del mar, la perdí unos segundos de vista pero rápidamente puede verla y repescarla.
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